Primera llamada, primera. Al llegar este momento, muchos meses tuvieron que pasar para que lo que en unos instantes se presenciará tenga una coherencia integral. La vida breve, ópera de Manuel de Falla, tiene varias peculiaridades que la hacen ser un reto para cualquiera que se embarque en la labor de presentarla: su música es majestuosa, no así su libreto. En el libreto existen varias secuencias en las que no se dicta lo que en escena debe estar sucediendo, por lo que el director de escena juega un papel fundamental en cuanto a creatividad se refiere. Las escenas del ballet son largas y permiten al espectador disfrutar del impresionismo de la música de Falla, mostrando pasajes polifónicos característicos de la innovación musical que el autor en su tiempo, logró recrear. La muerte de Salud, la protagonista, quien se muere “de amor” literalmente, no marcan en el libreto un motivo lógico-racional que tanto necesitamos en esta era de modernidad poco romántica.
Más allá de lo que este reto implica a la escena, en el caso que nos confiere, la producción que se llevará a cabo en esta ocasión sobre la obra de Falla, no plantea un reto menor. Un equipo de creativos provenientes de Buenos Aries, encabezados por Marcelo Lombardero, director artístico del Teatro Colón, que pro primera vez trabajará en México, de la misma manera que Luciana Gutman en el vestuario, Tito Egurza en la escenografía y José Luis Fiorruccio en el diseño de iluminación, logran plasmar una propuesta estética de grandes desafíos. El ballet proveniente de Madrid y el director concertador, José Luis Castillo, español de nacimiento y residente en el DF desde hace algunos años, plantean un reto por demás interesante a la producción en nuestra ciudad.
Hablar de producción ejecutiva en específico en nuestro estado es hablar de una laguna de años. Para nuestra ciudad siempre ha sido más fácil comprar producciones que generarlas puesto que las implicaciones de llevar a cabo una ópera por más pequeña que sea, no es cualquier cosa. El reto de la ópera para cualquier productor ejecutivo es conjuntar varios elementos a la vez, para después proceder a ensamblarlos. Encontrar espacios de ensayos, seleccionar un elenco, reflexionar sobre una propuesta creativa, repensar la estética, coordinar la logística, llevar a cabo la realización de vestuario, escenografía, utilería, maquillaje, caracterización y todo cuanto quepa en la ópera, necesita una cabeza que piense con varios frentes. En la ópera tan importante es lo vocal como lo musical, así como lo escénico y lo visual. El gran reto de este género es la complejidad de su puesta en escena. El teatro, la danza, la música, lo vocal, lo visual, lo literario, en general todas las bellas artes coinciden en la ópera. He ahí su riqueza.
Escuchar una ópera en un CD o disfrutarla en un DVD nunca será lo mismo. La ópera nació para ser sentida, vivida, apreciada, contrastada, recreada, resignificada. La ópera es el milagro que la modernidad aun no ha podido arrebatarnos, aquello que sólo en presencia viva, confronta, seduce, apasiona. La ópera es el lugar que los mitos nos han legado, ese rincón donde lo clásico no dista de lo contemporáneo, donde se deja en escena la constancia de la muerte y la vida.
La complejidad que implica una ópera para los que estamos detrás de escena se ve recompensada cuando en un instante todo fluye, todo se conjunta en un mismo espacio y corre con vida propia. Es entonces cuando las noches de insomnio, las madrugadas constantes y la vida dejada en el teatro, toma su propio sentido y habla por sí solo. Sólo entonces la ópera se presenta a sí misma como el lugar en que todas las pasiones confluyen.
Sinopsis de la ópera
Manuel de Falla. Drama lirico en dos actos. 1905.
Libreto de Fernández Shaw.
Primera presentación en the Municipal Casino, Nice, el 1 Abril 1913.
Personajes
Salud, gitana soprano
Paco, amante tenor
La abuela mezzo-soprano
Tío Sarvaor bajo
Carmela, esposa mezzo-soprano
Manuel, hermano baritone
Salud y Paco son amantes, pero él acuerda casarse con una muchacha de su propia clase, Carmela. La boda se realiza mientras es observado desde la calle, por Salud. Su tío Sarvaor ofrece entretener a los invitados y Salud se presenta para delatar a Paco, antes de caer muerta.
La ópera de De Falla se ubica en Granada, España e incluye una serie de danzas que se han presentado en variados arreglos y coreografías, de la cual es notable la primera danza, compuesta para violín y piano por Fritz Kreisler.