el derecho de autor en estos tiempos

Soy

una letra

un signo

baile que nunca rompe de cinco garabatos

que suena

que se calla

Otros tienen el nombre

y así se reconocen

son:

su rúbrica.

Podrían pelear incluso

en su defensa:

matar:

morir:

matarse...

Yo

soy sólo esa danza y su secuela:

la vida individual

la biografía.

Basta pulsar equivocadamente

y el texto en la pantalla

continuará sin mí

continuará sin tí...


algunos poemas del Chac Mall

1- Espectacular con puntos suspensivos

Esta tarde

Invisible

Lo mejor de la selva

recorre el mall:

pronto se hará sentir...

2- Preguntas al subir

¿Quién se fija?

¿Quién pone los ojos realmente

en la baranda de la escalera eléctrica?

¿Quién sabe lo que mide una anaconda?

3- Chemise

Diminuto el verde escudo,

icono prestigiado,

va creciendo en tu pecho:

con prehistóricos giros

y nada sutiles coletazos

ya se vuelve

ya abre sus fauces

ya está tu corazón

dispuesto a que lo exhibas.

4- Carta de navidad

Por alguna razón que se pierde en el tiempo

los calvos maniquíes del almacén detestan

y han odiado al falso y estridente santaclós:

hienas para sus renos le han pedido,

y a él: toros de lidia.

5- Hormigas

Líquida multitud

que consumista alud

aprovecha la oferta

tropieza en plena puerta

a sus pies roja alfombra

devora hasta la sombra

tras ello siempre junta

se va la marabunta.

6- Contrahechizos en el tercer milenio

Despacio, muy despacio,

abrió los ojos:

totalmente batracio

los cerró.

7- De película

Buenos y malos filmes

quedarán cortos:

en las cuatro esquinas de la juguetería

Tigre ha acabado de marcar su territorio.

8- Bondad de obesidad

Ella salta al vacío pero falla:

feliz o infelizmente

la muerte tampoco

es de su talla.

9- Para pagar mañana

Anorexia y bulimia

hijas de Barbie y Ken

están en venta hoy

al dos por uno.

10- La noche del nativo

Largas cuentas largas

tendrás que apoquinar

por las engarzadas cuentas

cuando llegue la noche

caerás empero en cuenta:

igual que la sonrisa

de quien te las vendió:

sin luz, nomás no hay brillo.


Inútil es volverte

Mientras lees esto

otro como tú

se aproxima a la espalda descubierta.

No te muevas, no.

Inútil es volverte,

untarte sombra líquida en el muro

mirar como te mira frente a frente

sentir como te lee

mientras lees esto.


bardo: primer soneto

Cambié posteridad a inmediatez

Y mística por práctica troqué

Cogerlo todo de una buena vez

Fue la consigna por la cual opté

Conocí lentamente haz y envés

La realidad del mundo disecté

Le recorrí los fondos, vi la tez

Y todos sus secretos yo libé

Más tarde con el tema hice un soneto

Pues conocía la forma y la receta

De hacerlo con higiene y con respeto

Pero no me fue grata tal faceta

De las burlas me convertí en objeto

Pues nadie me aceptó como poeta

bardo presenta a bardo en alta voz (a manera de prólogo)

para leer en voz alta y uno solo

pues si no los demás se darían cuenta

y nos bautizarían locos del pueblo

por no fijarse en qué es lo que se dice

pues a pesar del fárrago-diría mas bien

buscándolo-

del numen narrativo

aquí: se dice algo.

contra la economía

y la expresión de ahorro de las tías

solteronas

que abunda en estos tiempos y

estas localidades,

aquí: se dice algo

y esto

que aquí se dice

uno lo puede hallar

si lo lee en alta voz

altazor

alteza no serena

ante quien el poeta (léase bardo)

alza el moderno stetson

y luego postra plantas

"¿lo sabes todo batman"

pregunta el ayudante detrás del antifaz

"no sabría contestarte"

responde dialéctico el quiróptero...

no obstante lo pueril del argumento

(y la cacofonía más que evidente ingrata)

el poeta recoge de aquel viejo serial

televisivo

los dinámicos golpes de la onomatopeya

y mezcla en una mina (la cueva del creador)

el brebaje huidobro junto con adam west:

a esto añade tom waits que percute

macetas

y la acumulación del diccionario con lo

que las palabras

se atreven a rendir si se les saca el jugo

siguiendo el mecanismo aquel de "¡chillen putas"

preclaramente avisorado y dicho.

y si alguien arguye

que esa no es la manera (o que no deba serlo)

lo reto a zambullirse en el 68

con la misma fruición con la que bardo canta

la cruda realidad aleccionante de pies en

esta tierra

que fue el 69: puedes estar a ciegas pero

puedes oír

y puedes degustar tu camino hacia el éxtasis

y luego platicarlo en pleno uso de lengua

y facultades

con el único afán de compartir y surtirnos

de nombres

para lo tantas veces innombrado y hermoso

:un ombú un baobab un floripondio un roble

no juntan la floresta pero sí crean un

mundo

del cual colgar la cuerda del columpio

y bien...

me ha sugerido bardo que coja el pizarrón

la tiza

el trozo de papel

la efímera pantalla de la computadora

la para mi imposible pluma fuente (debí optar por ser zurdo)

y excriba

plasme

trace

un lance introductorio

a un libro de poemas que se presenta hoy

que ya es otoño (aunque en alguna parte es primavera)

lo que yo puedo hacer es poca cosa (y aún así suficiente);

es lo que hará el lector:

"ah"

me siento en mi sofá

comienzo por la A,

avanzo para entrar

empaparme

acomodarme

incomodarme

darme

al mundo de bardo por entero

(la invención del lenguaje de un ritmo

peculiar y la respiración para danzarlo)

no al modo del poeta (léase bardo)

sino al mío:

el modo del lector dueño del libro y su

particular lectura

esto es:

el que esto escribe

dejemos al poeta (léase bardo)

y a quien se erige en crítico

las consideraciones del autor

al lector: la lectura.

yo levanto las nalgas

y despego los labios dado que nadie fisga:

tambores de latón

sacabuches barrocos

pífanos resoplados y cajas percutidas

arrebatan al silencio mi recámara

y saltan para menearse

hasta los muebles.

de tales arrebatos

(paroxismo es un término elegante y abstruso)

y contagiado aún

doy noticia y grito enhorabuena.

a manera de prólogo

bailo un par de poemas

luego

limpio mis pies en el tapete

y escribo:

bienvenidos.


historia en la penumbra

sor juana humedecida

retira la hoja de eva

y acomoda su cuerpo en el diván.

confieso padre que ésta es la poesía:

el musgo

el alto mar

la torre del vigía

"mi corazón deshecho entre tus manos"

segismundo no atina

a interpretar sus sueños

y ordena a la mujer que

como penitencia

dedique a dios

y adiós

así cada domingo

hasta que la expulsión...

el fin de la terapia.

doy fe

desnuda

como un hada que del agua brota

caminó sobre mis huellas

secas en el fango

sabio sería negarlo

pero no puedo hacerlo:

me volví.

y dios me espiaba...

ahora puedo decirlo

porque ya sé

para qué sirven las palabras.

me volví y eché a hablar;

sonidos fueron en el acto

lo que antes pensamientos...

dios nos dejó al garete

en este barco

llevándose sus bártulos.

así era el paraíso

y ahora aquí

doy fe.

   
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